Estoy terminando de leer un par de libros que una de mis mejores amigas me recomendó que se llaman “Mujeres que Aman Demasiado” y «Padres que Odian” muchos habrán oído hablar de ellos, son muy famosos pero por alguna razón no habían llegado a mis manos hasta hace un par de semanas. Y así ambos libros me han abierto los ojos de manera impresionante para darme cuenta de que eso que yo creía sanado en su totalidad sigue con bastantes facetas ocultas, emociones reprimidas y heridas sin cerrar.
Y todo esto comenzó con una experiencia que tuve hace un par de semanas en donde atraje a un pequeño maestro de vida que vino a mostrarme la falta de autoestima que sigo cargando y arrastrando desde mi infancia. Y claro yo me dije, carajo ¿hasta cuándo voy a terminar de superar eso que llaman los ángeles “la pobre imagen que tengo de mi misma”?.
De entrada tuve una maraña de emociones desde ansiedad, miedo, tristeza, enojo, culpa y todo este conglomerado emocional empacado en mi pecho, sin poder descifrar bien a bien cada una de ellas, sin saber bien de dónde vienen, como surgieron y desde cuando están guardadas esperando salir. Y lo que es peor, sin saber por donde empezar a sacarlas, sanarlas o liberarlas.
Una de las cosas que descubrí con la ayuda de estos dos libros y junto con la lección de vida que atraje donde me mandaron a la goma por una razón que para mi es totalmente trivial es lo siguiente:
1.- Si estoy atrayendo a una persona a mi vida que está emocionalmente NO disponible, es porque YO estoy emocionalmente NO disponible, por más que yo crea que si lo estoy.
2.- Si he atraído a alguien a mi vida que de manera inconsciente me idealiza y que por consecuencia e inconscientemente me exige llenar sus expectativas de mujer interesante, digna de conocer y casi perfecta es porque YO de igual manera tengo una auto exigencia desbordante tratando de llenar expectativas e intentando ser perfecta.
Y como en todo juego del ego todo lo que idealizamos está destinado a caer del pedestal, esta persona en cuestión que tiene sus propias ideas de como tienen que ser las cosas y con su propia historia de vida que desconozco y que sin duda carga sus propios prejuicios y heridas personales terminó por juzgarme y rechazarme sin realmente conocerme, se desilusionó y se formó una idea sobre mi basándose en un malentendido por chat, aunque creo que más bien esa fue proyección de él y ese ya es tema aparte que desconozco y no me corresponde. Y entonces así llegué a la tercer conclusión:
3.- Si atraje a una persona que termina por tratarme con silencios, evasión, rechazo, indiferencia, falta de comunicación y honestidad, es porque YO soy la que me trato a mí misma de igual forma: me auto ignoro, me rechazo, me trato con indiferencia, no soy honesta conmigo misma y en resumen me autoboicoteo.
Recordemos una regla que no es muy obvia y que en el libro «Las Reglas Espirituales de las Relaciones” de Yehuda Berg describe perfectamente: iguales se atraen, nunca opuestos, podrán parecer en la superficie que son dos personas totalmente distintas de carácter y en gustos, pero al final atraemos personas o relaciones que vienen a mostrarnos la parte que no logramos ver de nosotros mismos, como dice el dicho “lo que te choca, te checa” y justo porque son iguales que nosotros o dos caras de la misma moneda es que existe la posibilidad de crecer, aprender y sanar para ser mejores seres humanos. Si ponemos la suficiente atención y nos observamos con detenimiento podremos descubrir esa parte oculta que no queremos ver pues todo el tiempo estamos proyectando nuestro mundo interno. La realidad afuera no es más que un reflejo de nuestro universo oculto, lo difícil es lograr verlo, pues a nadie nos es fácil reconocer cuanta carencia de amor propio tenemos.
Todo lo anterior se resume en un hecho doloroso y muy confrontador pero real; sigo teniendo un vacío interno que quiero o intento llenar a través de una relación amorosa, generando obsesión y una adicción inconsciente a embarcarme en relaciones que terminan siendo poco satisfactorias, pues estoy repitiendo el patrón aún latente de mi infancia donde mi niña herida que busca la eterna aprobación y reconocimiento de papá sigue en su intento incansable de tratar de cambiar esta vez el resultado y sigo neceando en buscar afuera lo que solo podré encontrar conmigo misma.
También he de reconocer que en varios casos he resuelto de manera asertiva solidaria y armoniosa el final de mis relaciones. Al final lo que importa es que logremos sacar provecho de cualquier situación para poder ir expandiendo más nuestra conciencia de nosotros mismos.
Por otro lado también pude descubrir que mi idea de que he vivido plenamente mi soltería y mi libertad ha sido una verdad a medias. Porque si bien estos últimos casi 3 años los he disfrutado de sobremanera pues me he dedicado a nutrir mis sueños, mis pasiones aprovechando mi libertad y aventurándome al máximo haciendo las cosas que amo hacer, también todo este tiempo siempre ha estado latente de manera no muy consciente la idea de que encontraré a esa persona que me complementará. Y justo ese es el problema, ¿porqué no simplemente me deja de interesar encontrar a alguien?.
Entonces desde mi experiencia descubrí que existen dos formas de vivir ser soltero cómodamente, la diferencia es sutil pero radical y en esencia es diferente:
En una aprendes a estar cómoda contigo misma, disfrutas tu soledad pero muy en el fondo o no tan en el fondo estás en una constante expectativa o búsqueda de alguien para llenar un pequeño o no tan pequeño hueco que suponemos la pareja anhelada llenará.
En la otra forma de vivir la soltería es cuando de manera consciente y genuinamente te enfocas a darte el tiempo para ti mismo, para llenar tus vacíos de ti, elevando tu autoestima, haciendo lo que te gusta, pero sobre todo reconociendo tus miedos y tus heridas para sanarlos, haciendo lo que te devuelve el poder o lo que te hace sentir más lleno de ti sin necesidad de nadie más. Es decir; aprendiendo a amarte con todo, con tus errores, con tus aciertos, con lo que crees que son tus defectos con tus experiencias incluyendo las que no te gustan y todo el paquete completo. Y creo que es importante que la elección de estar soltero no sea por resentimiento, ni porque estás amargada, ni porque te rompieron el corazón y estás harta o porque piensas que “todos los hombres son iguales” porque cambia la intención y el propósito.
Pero claro, como somos maestros expertos del auto-engaño clamamos a los cuatro vientos que estamos listos y que queremos pareja, que estamos preparados para encontrarla, pero que a veces no sabemos qué sucede al final para que no funcione porque hacemos todo lo que está a nuestro alcance para encontrarla y hacerla funcionar.
¿Qué sucede? nos preguntamos, pues sucede que como en el fondo somos incapaces de ver nuestros vacíos y la forma en la que nos auto-boicoteamos o nos odiamos y así atraemos a gente con vacíos de la misma forma y que terminará por boicotear la relación y mostrarnos nuestro vacío, ocasionándonos dolor, frustración y desequilibrio.
Entonces si eres de los que crees que no eres afortunado en el amor y has vivido este tipo de experiencias que pueden llegar a ser muy confrontadoras, tenemos dos opciones:
Opción A.- Ponernos en el papel de víctimas que es la opción más fácil y la menos consciente donde culpamos a la persona en cuestión, rompemos la relación, nos quejamos, pataleamos y sin recapitular nos apresuramos a seguir buscando la tan anhelada “alma gemela” o…
Opción B.- Optamos por ubicarnos en una posición de poder donde genuinamente queremos sacar el mayor provecho de la experiencia y tratamos de entender qué fue lo que dentro de nosotros atrajo a esa persona y a esa situación o lección, que heridas añejas o que creencias y pensamientos estamos repitiéndonos constantemente y que condicionan lo que nos sucede.
Cuando estás en la búsqueda de encontrar a alguien que te complemente en realidad lo que estás haciendo es distraer tu atención de lo que realmente necesitas encontrar que es ver tu falta de autoestima, lo cual causa dolor y para ver lo que te duele se necesita ser muy valiente, pues como mecanismo de defensa tratamos de ocultar el dolor de mil maneras, pues a nadie nos enseñaron a lidiar con ello, con la sensación de que no valemos lo suficiente, de que algo anda mal en nosotros y hacemos todo a nuestro alcance para esconderlo, como cualquier tipo de adicción, al trabajo, a las drogas, al alcohol y también las adicciones a las relaciones nos distraen para no voltear a vernos y buscar las causas reales de nuestra falta de autoestima y pasa que en el fondo seguimos siendo el niño lastimado en búsqueda de sentirse digno de recibir amor.
Vivimos en una sociedad donde se glorifican las relaciones codependientes de amor pasional con drama, celos, posesividad y sufrimiento, el sistema de pensamiento con el que vivimos nos hace creer que estos son los típicos síntomas del amor verdadero. Cuando en realidad es todo lo contrario. Amor es libertad, amor es confianza, amor es expansión, amor es crecimiento y compromiso al mismo tiempo, compromiso a cruzar muchos retos pero con el firme propósito de que ambas personas quieren crecer y aprender a amar juntos, pues no sabemos amar en realidad, el verdadero Amor no tiene opuestos, no se condiciona, solo se da.
En este planeta creo que casi nadie se salva de sufrir baja autoestima, cada quien en diferentes niveles, algunos más que otros y de diferentes formas, pero todos venimos a reconocer nuestro verdadero valor para aprender a amarnos a nosotros mismos primero para después poder expandir el Amor a los que nos rodean.
Y tú cuéntame ¿cómo lidias con la soltería y la auto estima?